Explora Islandia sin gastar una fortuna
Islandia es un destino fascinante, famoso por sus paisajes volcánicos, auroras boreales, cascadas y glaciares, pero también es conocido por ser uno de los países más caros para los viajeros. Sin embargo, con una planificación adecuada, es posible descubrir sus maravillas sin que el presupuesto se dispare.
Los meses de febrero, marzo y abril son ideales para visitar Islandia de forma más económica, ya que las tarifas de vuelos y alojamiento suelen ser más bajas en comparación con el verano. Además, el invierno y el inicio de la primavera ofrecen experiencias inolvidables, como la posibilidad de ver la aurora boreal, explorar cuevas de hielo y relajarse en aguas termales naturales con menos turistas. Aquí te dejamos algunos consejos clave para ahorrar dinero en tu aventura islandesa.
1. Encuentra vuelos baratos a Reikiavik con tiempo
El costo del vuelo es uno de los mayores gastos al viajar a Islandia. Para conseguir billetes baratos, lo mejor es reservar con varios meses de antelación y ser flexible con las fechas de viaje.
Utilizar comparadores de vuelos como Skyscanner o Google Flights ayuda a encontrar tarifas más bajas. Elegir febrero, marzo o abril para viajar permite evitar los precios elevados de la temporada alta. Además, algunos aeropuertos europeos como Londres, París o Copenhague ofrecen vuelos directos a Reikiavik con aerolíneas de bajo costo, lo que puede representar un gran ahorro.
2. Opta por alojamiento económico o acampada
El alojamiento en Islandia puede ser costoso, pero hay formas de ahorrar. En Reikiavik, los hostales y casas de huéspedes suelen ser más baratos que los hoteles, además de ofrecer cocinas compartidas para preparar comida y reducir gastos.
Otra opción es el alquiler de campers, que permite combinar transporte y hospedaje en un solo gasto. Durante los meses de abril, cuando las temperaturas comienzan a subir, es posible acampar en zonas designadas por una fracción del precio de un hotel.
3. Aprovecha el transporte público o el alquiler compartido de coches
El alquiler de un auto es una de las mejores formas de recorrer Islandia, pero los precios pueden ser elevados. Una alternativa para reducir costos es utilizar grupos de viaje compartido, como los que se encuentran en redes sociales y foros de viajeros, para dividir gastos con otros turistas.
Si el objetivo es explorar únicamente Reikiavik y los alrededores, el transporte público y los autobuses turísticos pueden ser más rentables que alquilar un vehículo. También existen excursiones grupales a destinos como Thingvellir, Geysir y Gullfoss, donde el precio del tour incluye el transporte, evitando gastos innecesarios.
4. Come barato en Islandia con supermercados y food trucks
La comida en Islandia puede resultar cara, especialmente en restaurantes. Para ahorrar, es recomendable comprar provisiones en supermercados como Bónus o Krónan, donde los precios son más accesibles.
En Reikiavik, los food trucks y locales de comida rápida ofrecen opciones asequibles, como el famoso perrito caliente islandés, una especialidad local que se puede encontrar en lugares como Bæjarins Beztu Pylsur. Además, algunos alojamientos cuentan con cocina, lo que permite preparar comidas y reducir considerablemente los costos.
5. Disfruta de las aguas termales sin pagar fortunas
Las aguas termales son uno de los mayores atractivos de Islandia, pero visitar lugares famosos como la Blue Lagoon puede ser costoso. Una alternativa más económica es el Sky Lagoon, con tarifas más accesibles y una ubicación espectacular frente al mar.
Otra opción es visitar piscinas termales naturales gratuitas, como Seljavallalaug o las aguas calientes del área de Mývatn, donde es posible relajarse en medio de la naturaleza sin gastar grandes cantidades de dinero.
6. Explora las maravillas naturales gratis
A diferencia de otros destinos, la mayoría de los paisajes en Islandia son completamente gratuitos. No es necesario pagar entradas para visitar cascadas impresionantes como Skógafoss o Seljalandsfoss, explorar la Playa de arena negra de Reynisfjara o caminar por los campos de lava del Cañón de basalto.
El Parque Nacional de Thingvellir y el Glaciar Vatnajökull ofrecen senderos espectaculares sin costo alguno, lo que permite disfrutar de la belleza de Islandia sin afectar el presupuesto.
7. Viaja en temporada baja para evitar precios elevados
Visitar Islandia en febrero, marzo o abril es una excelente estrategia para ahorrar, ya que la demanda turística es menor y los precios de vuelos, alojamiento y actividades son más bajos en comparación con el verano.
Además, estos meses permiten disfrutar de fenómenos naturales exclusivos, como la aurora boreal en el cielo nocturno o la posibilidad de hacer trekking en glaciares sin la multitud de turistas que llegan en los meses cálidos.
8. Evita cambiar dinero en aeropuertos y usa tarjeta de débito
El uso de efectivo en Islandia es mínimo, ya que prácticamente todo se puede pagar con tarjeta. Para evitar comisiones elevadas, lo mejor es utilizar tarjetas sin cargos por transacciones internacionales, como las que ofrecen algunos bancos digitales.
Evitar el cambio de divisas en el aeropuerto también ayuda a reducir gastos innecesarios. La moneda oficial es la corona islandesa, pero muchos lugares aceptan pagos en euros o dólares, aunque con una tasa de conversión menos favorable.
9. Reserva excursiones con antelación o hazlas por tu cuenta
Las excursiones organizadas pueden ser costosas, por lo que planificar con anticipación permite encontrar mejores precios. Actividades como el avistamiento de ballenas en Husavik o los tours a las cuevas de hielo en el sur de Islandia suelen tener descuentos si se reservan con meses de antelación.
También es posible visitar muchas atracciones de forma independiente alquilando un auto o utilizando rutas de senderismo bien señalizadas. Así, se puede explorar lugares como Geysir, Gullfoss o los fiordos del oeste sin depender de un tour organizado.
10. Lleva ropa adecuada y evita compras innecesarias
El clima en Islandia puede ser impredecible, especialmente en invierno y primavera. Comprar ropa de abrigo en el país puede ser caro, por lo que llevar ropa térmica, impermeables y botas adecuadas desde casa ayuda a evitar gastos imprevistos.
Además, las tiendas de souvenirs en zonas turísticas suelen tener precios elevados. Para encontrar recuerdos más asequibles, es recomendable visitar mercados locales en Reikiavik, donde se pueden comprar productos islandeses a precios más razonables.
Conclusión: un viaje inolvidable sin gastar de más
Explorar Islandia con un presupuesto ajustado es totalmente posible con una planificación adecuada. Elegir los meses de febrero, marzo o abril ayuda a reducir costos en vuelos y alojamiento, mientras que optar por comida de supermercado, aguas termales gratuitas y transporte compartido permite disfrutar del país sin excesos.
Con sus auroras boreales, cascadas, glaciares y paisajes volcánicos, Islandia sigue siendo un destino de ensueño accesible para quienes buscan aventura sin comprometer su economía.