Invierno en Japón: Aventura en tren

Palillos en mano

Por fin ha llegado el gran día: ¡allá vamos Japón! Saldremos de España en un vuelo regular.

¡Llegada a Japón!

Dependiendo de la hora de llegada de nuestro vuelo, comenzaremos a explorar los alrededores: el barrio de Asakusa, con sus tiendas de artesanía y puestos de street food tradicionales, os harán enloquecer literalmente.

Asakusa es la zona tradicional de Tokio y aquí visitaremos el templo Senso-Ji cruzando el Kaminarimon, la puerta del trueno. Este templo es el más antiguo de la ciudad, pero también uno de los más importantes.

¡¡¿Listos para disfrutar de la primera noche japonesa?!!

Modernidad y tradición

Hoy nos adentraremos en la zona de Ueno y sus parques.

Desde aquí llegaremos al barrio de Yanaka, que sobrevivió milagrosamente a los bombardeos de la II Guerra Mundial: si queréis, podréis visitar un museo instalado en el interior de una casa tradicional.

Por último, nos dirigimos a Akihabara: en el distrito del anime y el manga, nos sumergiremos en el Japón de las películas. Un paseo por el distrito de la electrónica, pero sobre todo del manga, el anime y los coleccionables de todo tipo, donde podremos perdernos entre salones recreativos, cosplay, maid cafés y todas las rarezas posibles. ¡Volveremos a ser niños por un día!

Entre Takeshita y Shibuya

¿Listos para una inmersión total en el Tokio más colorido y divertido?

Visitaremos la animada zona de Harajuku: aquí el arte callejero es muy colorido y las tiendas de ropa vintage conviven con las tiendas de cosplayers de la calle Takeshita y las boutiques de lujo que bordean la arbolada avenida de Omotesando.

Nos dirigiremos entonces hacia el barrio de Shibuya, saludaremos y nos haremos una foto ritual frente a la estatua de Hachiko. ¡Listos para cruzar el paso de peatones más transitado del mundo, en un caos ordenado que sólo en Japón es posible.

No es sólo un cruce: los carteles luminosos, las megapantallas, la gente, todo ello hace del cruce de Shibuya un lugar icónico de Tokio.

Budas gigantes, el mar y una noche brillante. Hoy dejaremos Tokio, al menos por un tiempo.

Llegaremos a la ciudad costera de Kamakura, un importante centro político en la Edad Media japonesa.

Ahora es un lugar de vacaciones pero, sobre todo, es el hogar del Gran Buda: situado en el templo Kotoku-in, es una estatua de bronce de 13 metros de altura.

Tras admirarla, nos relajaremos en la playa.
Volvemos a la capital japonesa para regalarnos una noche deslumbrante. ¿Dónde? En Shinjuku, por supuesto, el Tokio de los clubes nocturnos y el karaoke, las noches locas, los rascacielos y los carteles de neón.

Relax y naturaleza

Dejamos Tokio, para dirigirnos a Hakone, una localidad que forma parte del Parque Nacional de Fuji – Hakone Izu, un verdadero paraíso para los amantes de la naturaleza. Una de las principales características de Hakone son los onsen (aguas termales), y ¿quiénes somos nosotros para no probar esta experiencia? ¡Bañador y nos vamos!

Es importante recordar que la mayoría de las veces no se permite el acceso a los onsen públicos a las personas con tatuajes grandes (los pequeños se pueden cubrir). En cualquier caso, nuestras instalaciones ofrecen onsen privados en las habitaciones para que todo el mundo pueda disfrutar de la experiencia.

¡De nuevo en marcha!

Subiremos de nuevo al tren que nos llevará a Kioto. ¿Sabíais que fue la capital del país durante más de un milenio (exactamente desde 794 hasta 1868) y que es conocida como «la ciudad de los mil templos»? ¡¡¡En los próximos días entenderéis por qué!!!

Llegaremos a Kioto y daremos un pequeño paseo por las callejuelas de Pontocho, donde trabajan las geishas y maikos, con la esperanza de encontrarnos al menos con una de ellas.

El santuario de los santuarios

Hoy vamos a descubrir un lugar que, de todo Kioto, es uno de los más queridos: el Fushimi Inari Taisha.

Santuario construido en la base de una montaña, es famoso por su camino hecho de torii (estrictamente rojos, cada uno de ellos donado por una empresa japonesa).

Caminar hasta la cima de la montaña, deteniéndose de vez en cuando para hacer algunas fotos, es una de las actividades imprescindibles para cualquiera que llegue a Japón.
Por la tarde, haremos una parada en Nara, un lugar encantado.

La particularidad de Nara son los ciervos que deambulan libremente por el parque, que alberga varios santuarios y templos. Visitaremos el templo Todaiji, que alberga el Buda más grande de Japón, y el famoso santuario Kasuga, donde se guardan las linternas de los deseos.

Viaje al auténtico corazón de la ciudad

Hoy nos dedicaremos al verdadero Kioto, el de los templos y un silencio que te envuelve.

Primero visitaremos el castillo de Nijo, símbolo del poder y la riqueza del shōgunato Edo, durante casi 270 años residencia imperial.

Después nos trasladaremos a la zona de los templos, empezando por el Ginkakuji con su pabellón de plata.

Almorzaremos en el Mercado Nishiki, el mercado de pescado de la ciudad, y visitaremos el Templo Dorado (¡cubierto de auténticas hojas de oro!).

Creednos: ¡volveréis al hotel con el corazón lleno de belleza!

El Castillo y Dotonbori

¡Nos dirigimos a la estación en dirección a Osaka!

Visitaremos su castillo y descubriremos los rincones más peculiares de esta increíble metrópoli. Y para terminar el día por todo lo alto, pasaremos una divertida velada en Dōtonbori, el barrio nocturno de la ciudad.

Hacia el torii rojo de Miyajima

Hoy nos despediremos temporalmente de Osaka y subiremos al tren que nos llevará a la isla de Miyajima, un lugar mágico y espectacular.
La puesta de sol tras el torii rojo sobre el mar será de las más emocionantes del mundo, prometido.

Un viaje por la historia, porque no se puede olvidar

Hiroshima es la ciudad que simboliza la Segunda Guerra Mundial, o quizá el mal que puede hacer el hombre.

Visitar el Parque Conmemorativo de la Paz es vivir en primera persona lo que ocurrió en agosto de 1945.

Desde las ruinas de la Cúpula Genbaku, uno de los pocos edificios que quedan en pie cerca del epicentro de la explosión, hasta el museo con sus historias y exposiciones, todo aquí habla de destrucción. Pero también de renacimiento.

Hoy Hiroshima es una de las ciudades más habitables de todo Japón. ¡Disfrútadla!

Por la tarde, regresaremos a Osaka, donde dormiremos en un típico hotel cápsula. No os preocupéis: ¡os aseguramos que no tendréis claustrofobia! Al contrario, tendréis una experiencia más que contar.

¡Hasta pronto Japón!

Nos preparamos para despedirnos, rumbo al aeropuerto de Osaka.

Con una certeza en el corazón: ¡el nuestro será un hasta luego!

Vuelo de regreso a España.

* Dependiendo de los horarios de vuelo, la llegada a España puede ser por la tarde o al día siguiente.

Momento de despedidas

En tierra ya con tanta nostalgia… ¿cuándo nos vemos de nuevo?

En función de las salidas, el orden de las etapas puede variar, sin dejar de garantizar todas las visitas previstas.